Una isla "maldita"

Mallorca siempre estará en el recuerdo por aquel sufrido partido en el que el Espanyol de Luis Fernández tenia media salvación lograda a la media hora de juego y que, incompresiblemente, se estrelló en veinticinco minutos pavorosos. El equipo pasó de poder respirar tranquilamente a tener que ganar a ese Real Murcia de Luis García,sí o sí, a riesgo de que el Valladolid le diera el último toque a Segunda. La reacción del equipo con el de Tarifa fue de menos a más,a diferencia del equipo pucelano y no daba sensación de miedo pero esa derrota en Son Moix dejó tocado a algunos jugadores.

Ahora con Lotina, el partido vuelve a ser peliagudo a pesar del tremendo afán de donostiarras, gaditanos y malacitanos por sacrificarse en el doloroso lance del descenso. Mallorca volverá a ser sede de otro partido en el que el equipo perico deba romper con ese hado maldito que hace que no ganen en Son Moix desde aquella victoria que, esperemos sea reveladora, cuando el equipo enfilaba su camino a la final de Valencia. Cinco años consecutivos perdiendo son suficientes y ahora es el momento en que el equipo, si bien no cambia de forma de jugar, sea objeto de una mejor motivación por parte del entrenador con el fin de lograr esa victoria que se escapó tanto en Bilbao(la forma más amarga de perder dos puntos) y ante el Alavés