La misma historia de siempre

Afortunadamente hice una cosa bien el sábado pasado: preferí cenar fuera y dar una vuelta antes que ver el derby. Llegó un momento en que ver un encuentro entre ambos rivales destruye una buena noche de sábado(o el difícil regreso al trabajo si es en domingo el encuentro). Ese momento tuvo por protagonista a Rodríguez Santiago y la famosa mano de Messi, era aquella noche gloriosa de Tamudo hace poco más de un año;aquel monumental cabreo me hizo recapacitar: no valía la pena amargarse la vida por unos sujetos que lograrán que antes llegue la paz mundial a que ellos arbitren bien.Ya había visto en años anteriores unos robos similares pero quizás el "buenismo" me hacía pensar que esa historia de "los errores se compensan" se podía hacer realidad. Pero el tiempo hace ver estos hechos con tal óptica que ya doy por hecho el robo antes de que ocurra. Lo recomiendo: no vale la pena hacer sufrir el corazón por unos sujetos que, en vez de juzgar imparcialmente, deciden ir en favor de un contendiente, siempre el grande-que nadie se olvide, que también espero un robo en el Santiago Bernabeu- mientras los demás nos quedamos con un palmo de narices y, para más inri, al parecer obligados a aceptar semejantes robos porque, en un año catapún, un árbitro se equivocó y pitó a nuestro favor. Estos sujetos parecen que exigen que se les siga devolviendo el fallo de Guruceta multiplicado por 10.000.

¿ Es falta el toque de Luis García, empujado por Puyol, a Víctor Valdés?¿sí?Pues que lo desvele quién corresponda: el medio audiovisual. Medina Cantalejo que aún se dará el pegote por comentar al árbitro del Mundial 2006 la expulsión de Zidane, es el mejor ejemplo del gran favor que aportan las repeticiones.¿Quién está en contra? ¿Lo adivinan? Sí, el Barça es uno de ellos. Indigna escuchar que a los grandes se les pita más penaltys porque llegan más al área: sólo es cuestión de comprobar como no se pita la máxima pena en el Barça-Real Betis y luego comparar aquella jugada con la de Eto'o. ¿Beneficiado en ambas jugadas?El propio FC Barcelona.

Respecto al tema de las bengalas poco que decir. En principio, parte de la culpa se la achacaba al club por el tema de vender las entradas y a los responsables de seguridad aunque comprendía que no debe ser fácil vigilar tal masa de gente. Sin embargo, los vídeos que están rondando por internet ya apuntan a los Mossos d'Esquadra al permitir el acceso al estadio en ese estado de violencia. Al menos, se hubieran evitado los calores de "no intervenir para evitar males mayores" con los aficionados culés dentro de la gradería.