Un partido de gran tensión I

El primer pensamiento que tuve al conocer el varapalo del Real Zaragoza en Balaidos fue el de "puñeteros, estáis dejando en evidencia que ganamos a un equipo de mataos" tras el cuarto tanto vigués. Que al Zaragoza le sentó como una patada la derrota en el Bernabeu no es ninguna noticia, que el tercer tanto de Coro, la expulsión de Ccésar y el cuarto de Luís García rompieron la ilusión maña del empate en miles de pedazos.

Esperé que ganaran al Cádiz y empezaron bien pero acabó con una derrota inexplicable en aquel equipo que cogió la racha muy temprano. Ese Zaragoza de febrero era letal y de ello dan fe el 4-2 al Barça y el célebre 6-1 al Madrid y el chiste de ziz-ou de boca en boca. Se fue a garete su racha con el primer partido del Bernabeu , es decir, cuando el Zaragoza estuvo en un tris de ser eliminado por el Madrid(4-1). Desde aquel partido, el equipo maño empezó a declinar poco a poco y ahora más; de 11 partidos jugados desde entonces, 10 puntos de 33 posibles(2-4-5) por 13 nuestros(3-4-4). Puede que la comparación queda algo light si no fuera por los numerosos elogios que recibió el equipo de Victor Muñoz a diferencia del de Lotina.

Tras la Copa, que se presumía igualada mirando los últimos resultados previos a la final, el Zaragoza ha seguido perdiendo, el entrenador está con la soga( no será cesado pero es posible que tampoco seguirá un año más) y agradeciendo ese enero y mitad de febrero cuando ganaron los puntos suficientes para no sufrir